miércoles, 6 de abril de 2011

DANIELLA QUEROL



Inmersos en paisajes con distintos niveles de sentido, es que la comunicación entre naturaleza y posibilidad se hace presente. Con una gama de diferentes técnicas, colores y planos dentro de figuraciones y abstracciones, es que Daniella Querol representa el potencial mas fino de la naturaleza en presencia de su posible destrucción. Seres en acción, elementos en gestión, acciones que al interactuar forman curiosas ideas que transforman.
El las pinturas-dibujo, se presentan mundos en comunión donde casi siempre la bella fuerza consciente de sus personajes mantiene el equilibrio desafiando constantemente la presencia del peligro y la destrucción. 

Alejadas de las formas  conocidas, los personajes nos hablan a través de la superposición de formas presentes disueltas en sombras, que representan una suma de valores, seres, símbolos que interactúan en ese espacio tan real y tan fantástico al mismo tiempo.  Y es ahí dentro y detrás  de todas las formas, como uno puede encontrarse en una distinta manera de estar y ser en el tiempo y en la realidad. 

Es a través de la pintura que Daniella nos regala tiempo presente en movimiento de colores y múltiples relaciones que invitan a imaginar y crear mundos posibles dentro de este mundo lleno de formas duras que habitamos.





BROADCAST SPAWNING: Mariel Quevedo



La primera vez que vi la serie de pinturas Broadcast Spawning pensé en la evolución de organismos y la constante supervivencia de poblaciones. Múltiples cambios ambientales que conspiran junto con una constante multitud de agentes infecciosos para poner a prueba un mundo orgánico y presionar sus posibilidades evolutivas.

Estas formas orgánicas evocan varios organismos captados en un momento de transición, crecimiento, reproducción mutación y conflicto. Estas formas son ambiguas y reflejan ideas que vienen de la microbiología, la biología marina y la tecnología. Cada pintura es un momento congelado de una interacción; como conjunto son la representación de momentos simultáneos en un solo cuerpo.

La tela de la pintura quisiera dejar de ser una superficie estática para convertirse en una piel que respira e intercambia sustancias, que recibe y genera mensajes. Una superficie que se comporta como una red que invoca a un cuerpo que esta fuera de las categorías del conocimiento: animal, vegetal, natural, artificial.  Estas estructuras que ceden ante los cambios que le ocurren a esta piel se convierten en fantasmas de conflictos anteriores, batallas perdidas, se convierten en cicatrices. Son fantasmas emergentes que a su vez pueden ser una respuesta a la invasión,  o  una defensa.

Dulce M. Trejo